domingo, 30 de agosto de 2009

Que le ronque la mandarina y le apeste el mandil a mango

Corregir libros de texto sobre Hidalgo y Morelos, pide Arzobispado. Solicita aclarar que ambos héroes fallecieron en el seno de la Iglesia y no excomulgados (La Jornada, 090830).
[El arzobispado se refiere a la cristianísima condena de la cual reproducimos uno de sus detalles menos duros:] “...Sea condenado Miguel Hidalgo y Costilla, en dondequiera que esté, en la casa o en el campo, en el camino o en las veredas, en los bosques o en el agua, y aún en la iglesia. Que sea maldito en la vida o en la muerte, en el comer o en el beber; en el ayuno o en la sed, en el dormir, en la vigilia y andando, estando de pie o sentado; estando acostado o andando [el gerundillo ya fue usado, pero se repite para que amarre], mingiendo o cancando [o sea meando y cagando], y en toda sangría. Que sea maldito en su pelo, que sea maldito en su cerebro, que sea maldito en la corona de su cabeza y en sus sienes; en su frente y en sus oídos, en sus cejas y en sus mejillas, en sus quijadas y en sus narices, en sus dientes anteriores y en sus molares, en sus labios y en su garganta, en sus hombros y en sus muñecas, en sus brazos, en sus manos y en sus dedos...”
(http://www.tulancingo.com.mx/excomunion/hidalgo.htm)



Esta vez no hay epigrama
que supere esta madriza,
la perorata o soflama
es pa’ cagarse de risa.

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